>> Inicio | Teléfono 957 541 953 | C/Antonio de la Barrera, 10 - 14800 Priego de Córdoba | Mapa del portal | Subscripción RSSSubscripción RSS al Ayuntamiento de Lucena
 
 
Recomienda este artículo a tus amigos
21 de agosto de 2012 | Juan de Dios López Martínez

Haciendo aguas

Como otros muchos ciudadanos de Priego que un día tuvimos obligadamente que emigrar, por desgracia sólo podemos volver en fechas muy señaladas (Navidad, Semana Santa, Mayo, etc.) para poder disfrutar unos días de nuestro pueblo.

El edificio donde se encuentra ubicada nuestra vivienda fue construido hace ya bastantes años y, al igual que otros muchos en Priego, los contadores del agua no se encuentran en las zonas comunes del mismo, sino dentro de la propia vivienda. Ello ha impedido a lo largo del tiempo que el personal dedicado a la lectura de los contadores haya podido tomar con regularidad la lectura real de los mismos y, consecuentemente, en los sucesivos recibos se nos ha ido estimando el consumo de agua.

Hace algún tiempo, a fin de poder regularizar esta anómala situación, me personé en las dependencias de Aguas de Priego con la lectura real que el contador marcaba en ese momento. Fui atendido por una amable señorita que tras consultar los registros informáticos me informó que existía un saldo de agua a nuestro favor de más de setenta metros cúbicos. Una pequeña pantaneta que de seguir así nuestra situación asegura por anticipado el consumo de agua a varias generaciones de mis descendientes. Obviamente, me informó que el dinero que se me había facturado no se me iba a devolver, pero que en los sucesivos recibos no se cargaría consumo de agua hasta saldar la cuenta, aunque sí los gastos fijos del recibo.

Así las cosas, continuos recibos emitidos han venido sin consumo tal como se me había informado. Pero resulta que en el recibo del pasado mes de junio nuevamente se me estima un consumo de otros dos metros cúbicos, los cuales, como es natural, han venido a incrementar en la misma cantidad las reservas hidráulicas de mi pequeña pantaneta.

No conforme con ello, me pongo en contacto con la citada empresa Aguas de Priego a través del teléfono de "Atención al Cliente" que consta en el recibo; puesto de información que se encuentra ubicado en no sé qué punto de la geografía española.

Explicado el tema a mi interlocutor y tras realizar las comprobaciones informáticas que estimó convenientes, me confirma que su base de datos no recoge nada de lo que le he explicado. Algo que hoy día, en la era de la informática, resulta del todo inaudito. Cómo es posible que el Servicio de Atención al Cliente de Aguas de Priego no tenga acceso a los consumos de sus clientes en Priego. Así las cosas, mi interlocutor me remite a las oficinas de Priego para que me informen detalladamente de mi situación. Mi asombro sigue en aumento cuando me comunica que no me puedo poner en contacto telefónico con las oficinas de Priego porque todo el Servicio de Atención al Cliente de Aguas de Priego se canaliza por éste único teléfono. Total, que el Servicio de Atención al Cliente de Aguas de Priego no me puede atender como cliente porque su base de datos es distinta a la que tiene en las oficinas de Priego y no me puedo poner en contacto telefónico con la oficina de Priego porque estas oficinas no tienen Servicio de Atención al Cliente. Vamos, la viva imagen de la trasnochada "ventanilla" administrativa de la postguerra.

Continuando la amena conversación con mi interlocutor, y tras insistirle en la imposibilidad inmediata de poder trasladarme a Priego, me ofrece la posibilidad de que sea la oficina de Priego la que se ponga en contacto conmigo. Nuevamente mi asombro sigue en aumento al comprobar que el Servicio de Atención al Cliente de Aguas de Priego, en Priego, sí se puede poner en contacto conmigo, pero yo no me puedo poner en contacto con él porque no existe. Así las cosas, le facilito a mi interlocutor mis números de teléfono afín de que el Servicio de Atención al Cliente de Aguas de Priego, en Priego, se ponga en contacto conmigo. Como veo que pasan los días y este Servicio no se digna llamarme, reiteradamente llamo al teléfono del Servicio de Atención al Cliente para advertir de la ausencia de esa llamada, donde reiteradamente me informan que desde allí se ha comunicado a la oficina de Priego que se pongan en contacto conmigo, pero viendo que no lo hacen lo mejor será que me desplace a Priego donde me podrán informar detalladamente.

Éste ha sido hasta ahora mi duro peregrinar por Aguas de Priego y mucho me temo que en los próximos meses veré impotente cómo mis reservas hidráulicas se incrementan mes a mes hasta límites insospechados, y ello dando gracias a Dios de que su cubicaje sea exclusivamente digital evitándose así su desbordamiento, algo desde todo punto de vista inevitable ya que ni personándome en las oficinas de Aguas de Priego ni a través de su teléfono de Atención al Cliente mi problema tiene solución.

El neoliberalismo, corriente totalmente contraria al socialismo y cuya filosofía no es otra que hacerse con todos los bienes públicos para obtener beneficios privados bajo la falsa apariencia de innovadores modelos de gestión, comprendo que luche en una guerra sin cuartel en defensa de esos intereses; pero que unos individuos que se vanaglorian continuamente de ser socialistas privaticen los bienes públicos en beneficio de la actividad privada nos da clara muestra del tipo de socialismo que militan: el de sus intereses particulares, que es el factor común de la mayoría de ese medio millón de políticos tan inútiles como gorrones que tienen a este país en la ruina.

Y esto, particularmente, se lo tememos que agradecer a esos dos seres vivientes (o vividores, que es más propio), cuya vida guarde Dios muchos años pero al margen de la política, que se llaman Encarnación Ortiz y Javier Tarrías. Dos inútiles condecorados en las urnas, que un día privatizaron el agua de Priego en contra de la opinión de la mayoría de sus vecinos, y cuyo único fin era el de obtener dinero líquido ante la desastrosa situación económica del Ayuntamiento para así continuar la política de despilfarro que les ha caracterizado. En un abrir y cerrar de ojos se cepillaron más de tres millones de euros a cambio de dejar hipotecada el agua de este pueblo para el resto de nuestros días. Y en cuanto a la gestión, visto lo visto, ahora igual que antes, me da la impresión de que sigue haciendo las mismas aguas.

 

 

Comentarios

No existen comentarios para esta publicación
Deja un comentario

<< Volver a Opinión
Actualidad

Ya está a la venta el ADARVE nº 1151 del 1 de mayo de 2024

Ya está a la venta en los quioscos y librerías de costumbre el ADARVE número 1151  correspondiente al 1de mayo de 2024.¡No te quedes sin tu ...

Localizador

C. Municipales C. Culturales
Monumentos Policía
C. Educativos Areas Verdes
Servicios C. Deportivos


 
© Periódico Adarve | Tfno: 957 541 953 | C/Antonio de la Barrera, 10 - 14800 Priego de Córdoba | Diseña y desarrolla Xperimenta